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La familia de Julieta Poggio le organizó a la exjugadora una exclusiva fiesta sorpresa de bienvenida, luego de haber estado cinco meses aislada en Gran Hermano (Telefe). Al evento concurrieron familiares y amistades como Romina Uhrig y Daniela Celis.
Después de haberse convertido en la tercera finalista del reality, Julieta superó los 2 millones de seguidores en su perfil de Instagram y alcanzó un nivel de fama impensado para ella.
La fiesta de Julieta Poggio tras salir de Gran Hermano
La fiesta tuvo lugar en la mansión de su novio, Lucca Bardelli y el evento tuvo todos los lujos. Luces, carteles de bienvenida personalizados, sushi, pizzas, una cascada de chocolate stickers de la modelo, una torta de varios pisos y un stand de glitter.
Julieta Poggio lució unas botas plateadas y un conjunto que incluía pollera y top tipo strapless. La joven disfrutó de la celebración con dos mechones rosas en el cabello, bailó y se sacó fotos con todos sus invitados.+
La casona, que pertenece a la familia del novio de la influencer, cuenta con una amplia piscina que también decoraron con luces, globos y un descomunal cartel rosa que decía: “Bienvenida Ju”.
Otro de los detalles claves de la fiesta de bienvenida fue la musicalización, ya que contrataron a una DJ de una reconocida fiesta porteña. Por eso, los invitados se divirtieron hasta altas horas de la noche y podían lookearse con brillos y tatuajes temporales que tenían la frase de Julieta Poggio en Gran Hermano: “Fuera malas vibras”.
cs.
