Desde que somos pequeños, crecemos sabiendo que días antes de Navidad, comúnmente, se le hace una carta a Papá Noel para hacerle saber qué deseamos que nos traiga para Navidad. Pero, ¿alguna vez investigamos de dónde viene esta tradición de hacer regalos en esa fecha?
Muchos coinciden en que la verdadera fecha para regalar es el 6 de enero, cuando se celebra Reyes, en conmemoración a los regalos que los Reyes Magos le llevaron a Jesús el día de su nacimiento. Sin embargo, la realidad es que hay muchas versiones.
Una de las más conocidas remonta a los orígenes de las celebraciones, donde se llevaban a cabo algunos rituales durante el solsticio de invierno para celebrar a sus dioses.
La Saturnina, por ejemplo, tenía lugar entre el 17 y el 24 de diciembre, se daba en la antigua Roma y era la celebración de Saturno, el dios del grano y la agricultura. Ahí se realizaban intercambio de regalos a modo de buen augurio para tener una buena actividad económica para la próxima cosecha.
En cambio, el cristianismo se basa en lo que dice el Nuevo Testamento de la Biblia, donde se relata la historia mundialmente conocida del viaje de los Reyes Magos llevando oro, mirra e incienso para agasajar el nacimiento de Jesús, fecha por la cual se celebra Navidad.
Más allá de las creencias de cada persona, lo cierto es que data del siglo X el intercambio de regalos en Navidad que hoy por hoy se practica en la gran mayoría de las culturas universales.