La noche de ayer quedará para siempre en la memoria de Jimena Barón, ya que gracias a su disco “La Tonta”, la cantante ganó por primera vez el Premio Gardel a Mejor Álbum de Artista Pop . Es así que inevitablemente se emocionó hasta las lágrimas y brindó un sentido discurso de agradecimiento, donde no faltó nadie.
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Entre la lista de agradecidos se encontraba su equipo de trabajo: Jime no dudó en reafirmar su amor por ellos y expresó lo mucho que constó la realización de este proyecto.
Luego dedicó unas sentidas palabras a su hijo Morrison, quien tuvo una participación especial en toda la previa al evento ya que llegó a la red carpet con un look similar al de mamá. Entre sonrisas y buena onda, el niño ante las atentas cámaras que los esperaban.
Sin embargo, Barón dejó las palabras más emotivas para el final. “Este premio se lo dedico a todas las mujeres. Se lo dedico a todas esas mujeres que alguien les hizo sentir o les dijo que no eran lo suficientemente lindas o buenas, talentosas, inteligentes, fuertes y valientes como para concretar sus sueños solas. Lo somos porque justamente somos mujeres y eso a los demás les da un poco de miedo”, aseguró la cantante en el escenario.
Su discurso llenó de orgullo a los presentes y emocionó a las mujeres que la escucharon atentamente en el auditorio del CCK. Karina la Princesita, fue una de ellas y sorprendió a todos al mostrarse movilizada hasta las lágrimas por el mensaje de su colega.
“Comparto esto con las que todavía están en la tormenta para que salgan adelante y sepan que se puede. Mírenme a mí, se puede. Brindo por menos tontas y por más mujeres valientes”, finalizó la artista, quién además utilizó como accesorio un pañuelo verde en su muñeca, símbolo del apoyo a la despenalización del aborto.