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Máxima Zorreguieta es una verdadera fanática de los perros. Muchas personalidades, a lo largo de la historia, han sido conocidas por el fuerte vínculo que forjan con sus fieles compañeros. En el caso de la reina consorte de Países Bajos, es la dueña de tres perros que la acompañan desde hace tiempo.
Los tres animales habitan el palacio junto a la esposa de Guillermo Alejandro y toda la familia real, aunque al ser de razas diferentes, cada uno tiene un cuidado diferentes, necesidades diversas y además la reina ha establecido vínculos diferentes con cada uno de ellos. Aparentemente, el favorito de Máxima es Mambo, un caniche que le regalaron para su cumpleaños número 50.
Su propia hija, Amalia, expresó en diálogo con Claudia de Breij: “Mambo es en realidad para mamá, porque Alexia y yo nos vamos de casa”. Dado el pequeño tamaño de los caniches, el perro puede viajar con ella y pasar mucho tiempo en interiores del palacio. Se trata de una raza muy doméstica y que se adapta fácilmente a la vida de los humanos.
Los perros labradores de Máxima Zorreguieta
Además, la argentina es dueña de los labradores Skipper y Nala. Estos perros son conocidos por ser buena compañía para todas las edades, suelen tener un carácter cariñoso y son conocidos por su gran inteligencia. A diferencia de los caniches, los labradores necesitan espacio al aire libre para liberar energía, dado su gran tamaño, por que lo habitan más los jardines del palacio.
Máxima Zorreguieta tiene algunas las razas de perros más famosas en el mundo pero cada una tiene necesidades muy diferentes. El caniche, hasta el siglo xv, se consideró de uso exclusivo de los aristócratas y nobles; mientras que en su origen, el labrador se desarrolló en el Dominio de Terranova.
