Pese a que terminaron su matrimonio hace más de un año, Jennifer Aniston y Justin Theroux siguen muy unidos, y eso lo demuestra el reciente suceso que debió afrontar la expareja.
El lunes por la mañana, Theroux informó a través de su cuenta de Instagram la muerte de su perrita Dolly, una pastor alemán que era la compañera de ambos mientras duró su relación. "Esta noche, al atardecer, después de una lucha heroica …el miembro más leal y protector de nuestra familia, Dolly A, dejó su espada y su escudo. Estaba rodeada por toda su familia", escribió el actor en su cuenta personal.
Para acompañar el mensaje, Theroux publicó una imagen de la perrita aún con vida y cinco fotografías del cuerpo de Dolly cubierto por pétalos, antes de envolverla con una manta. Pero lo curioso fue que en las fotografías aparecieron las manos de Justin junto a las de una mujer, lo que de inmediato desató especulaciones sobre la presencia de Jennifer Aniston para despedir a su mascota.
Para cuando Aniston y Theroux se casaron en 2015, Jennifer ya tenía una década con Dolly. De hecho, cuando la pareja decidió casarse, lo hicieron en la casa que la actriz compró en 2012, para que sus perros pudieran estar presentes.
"Realmente, la forma más incondicional de amor que puedes encontrar es con un perro. Están emocionados en el momento en que llegas a casa, y muestran la misma cantidad de emoción todos los días. Son leales y siempre, siempre fieles", declaraba Aniston sobre sus compañeros de cuatro patas a los que ama como si fueran sus hijos.
Aniston y Theroux se separaron en febrero de 2018 después de dos años y medio de matrimonio y siete como pareja. En ese momento, Justin reconoció en una entrevista con el The New York Times, que la separación había sido "desgarradora" pero "amable", y aseguró que quedaron como buenos amigos: "Nos respetábamos lo suficiente como para que fuera lo menos doloroso posible".