Charlène de Mónaco regresó a Europa y está recuperándose de las secuelas que le generaron las distintas intervenciones quirúrgicas que tuvo que realizarse tras contraer una severa infección en nariz, garganta y oídos durante su larga estadía en Sudáfrica. Frente a los problemas que enfrenta la princesa, Alberto de Mónaco hizo un desesperado pedido a la prensa.
"No sufre ninguna enfermedad grave o incurable, no es tampoco un problema de pareja. Nuestra pareja no está para nada en peligro, quiero ser claro sobre esto. Se trata de las consecuencias de todas las operaciones que ha sufrido en los últimos meses" aseguró el príncipe Alberto el diálogo con Paris Match.
Desde que Charlène regresó a Mónaco, el Palacio comunicó que la princesa se ausentaría de sus obligaciones. Fue el príncipe Alberto quien confirmó que su esposa no se encuentra en la residencia real, sino que está recuperándose en una clínica de ubicación secreta. Al parecer, aseguran que Charlène fue ingresada a una prestigiosa institución en Zurich, donde tratan problemas de adicciones y salud mental.
"Decidimos juntos, con nuestra familia cercana, que lo mejor era que pudiera descansar tranquilamente, fuera de Mónaco, en el extranjero, por razones evidentes de discreción y comodidad" aseguró el jefe de Estado. “Es necesario que todo el mundo lo entienda. Lo digo amablemente: Déjenla tranquila. Déjennos tranquilos un tiempo” añadió Alberto.
FF