El príncipe Guillermo, Kate Middleton y sus pequeños hijos, George, Charlotte y Louis tuvieron un encuentro con los duques de Wessex, Eduardo y Sofía, quienes también estuvieron con sus hijos, Louise y el vizconde de Severn.
Las parejas reales con sus respectivo niños disfrutaron de una jornada navideña en Sandringham. Lo que imaginaron como un encuentro alegre y divertido se transformó en un blanco de críticas.
Se los acusa de no haber tomado los recaudos sanitarios necesarios para prevenir el Covid-19. Si bien ambas familias llegaron al lugar por separado y mantuvieron la distancia correspondiente, sumaban 9 personas, número que supera el de 6, impuesto por el gobierno británico.
Fuentes del palacio aseguraron que la reunión fue casual y que entre ellos hubo muy poco contacto, lo que lejos de calmar las aguas, generó aún más escándalo. Tras infringir esta norma a la vista de todos, se espera su justificación.