La historia entre la infanta Elena de España y el príncipe Eduardo de Inglaterra, cuarto hijo de la Reina Isabel II, generó algunos rumores y versiones de romance que no pudieron concretarse.
Todo comenzó cuando ambos monarcas coincidieron en las celebraciones de las bodas de plata de Harald y Sonia de Noruega, donde la complicidad entre la infanta Elena y el príncipe Eduardo de Inglaterra llamó la atención y generó especulaciones sobre una posible unión entre ellos.
Los royals dieron un paseo en carruaje, en el que la infanta Elena y el príncipe Eduardo de Inglaterra compartieron risas y confidencias. Las imágenes captadas por la prensa mostraban a estos dos miembros de la realeza, que en ese momento tenían treinta años, disfrutando del paseo por lo que despertó el interés de la prensa y generó rumores sobre la posibilidad de una relación romántica.
Por qué la relación entre la Infanta Elena y Eduardo de Inglaterra no pudo ser
A pesar de los rumores, este romance no pudo ser. En aquel momento, la infanta Elena ya mantenía una relación con Jaime de Marichalar, con quien se casó en 1995. Por su parte, el príncipe Eduardo de Inglaterra también encontró el amor poco después de este encuentro, contrayendo matrimonio con su actual esposa, Sophie Rhys Jones, en 1999.
El encuentro entre la infanta Elena y el príncipe Eduardo de Inglaterra durante las bodas de plata de Harald y Sonia de Noruega causó revuelo en la prensa y despertó la curiosidad del público. Aunque las imágenes captadas mostraban una complicidad evidente, estos momentos quedaron en el ámbito de la amistad y la camaradería. Tanto la infanta Elena como el príncipe Eduardo encontraron el amor en otras personas y formaron sus respectivas familias.
Fotos: AFP
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