Editora Ejecutiva del Área de Entretenimiento. Se ha especializado en moda y lifestyle. Ha trabajado en la revista CARAS y actualmente es parte de Marie Claire. Ha sido profesora de Espectáculos en el Máster de periodismo que imparte Editorial Perfil y tiene formación de posgrado en moda y lujo en la Universidad Autònoma de Barcelona. Mail: [email protected]
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La visita de Meghan Markle a Wimbledon generó un gran revuelo luego de que trascendiera que los guardaespaldas de la duquesa de Sussex no permitieron que nadie la fotografiara. La esposa de Harry fue a alentar a su amiga Serena Williams y quiso pasar desapercibida. Sin embargo, cómo era de esperarse su presencia llamó la atención y la ex actriz volvió a ser el centro de las críticas. Esta vez porque 'The Times' publicó un explosivo artículo en donde un organizador del evento disparó sin piedad contra la mamá de Archie.
Un miembro de la producción del All England Club, club privado de tenis con base en Wimbledon, describió a Markle como "una verdadera pesadilla". "It was a nightmare, she was a nightmare" ("Fue una pesadilla, ella fue una pesadilla", en inglés) sostuvo la fuente que decidió mantener el anonimato.
La duquesa no pudo ingresar a la Royal Box -el espacio reservado para las celebridades- ya que estaba vistiendo jeans. Detalle no menor, ya que por protocolo del torneo, está terminantemente prohibido el uso de este tipo de prendas.
Este comportamiento de Meghan llamó poderosamente la atención y las críticas la emparentaron de forma directa a su cuñada, Kate Middleton, quien es patrona del All England Club y que siempre ha respetado las estrictas reglas de vestuario.
