Con 21 años de edad, ojos azules profundo y su cabello rizado color castaño, María Pedraza captó la atención de todos. Tras ser parte de la Casa de Papel, en donde se puso en la piel de Alison Parker, la joven ganó protagonismo y se convirtió en una de las más buscadas del medio.
Esteban Crespo, cineasta nominado al Oscar por el corto "Aquel no era yo", fue el primero en posar su mirada en ella. La descubrió vía Instagram y no dudó en convocarla para ser parte de "Amar", una película que habla del amor pasional y conflictivo entre dos adolescentes.
A sus 8 años comenzó a estudiar en el conservatorio y a los 18 se recibió de bailarina profesional de danza clásica. Su reconocimiento mundial llegó gracias a la serie española de Netflix, en donde se convirtió en la rehén estrella del atraco más famoso de la historia.
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