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Los Ultrasonidos de Alta Intensidad Focalizados (HIFU) han venido para instalarse como la nueva tendencia en tratamientos estéticos faciales y corporales no invasivos, reemplazando en muchos casos incluso a ciertas cirugías que ya no son tan necesarias.
Por esa razón la Dra. Carolina Vincenti, Médica especialista en Dermatología y miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología nos comenta. “Los pacientes prefieren, cada vez más, técnicas con resultados rápidos y que no necesiten tiempo de recuperación, pudiendo retomar inmediatamente las tareas habituales”.
Recientemente llegados para responder a las necesidades de sus clientes, aparecen los nuevos equipos de HIFU 3D. “Esta tecnología permite realizar hasta once líneas multidimensionales en los estratos dérmicos más profundos, inclusive hasta en el SMAS (sistema muscular aponeurótico superficial) logrando un “efecto lifting” por actuar sobre el “sosten” de todos los músculos faciales”, afirma Vincenti.
El mecanismo por el que logra estos resultados tan sorprendentes es porque provoca múltiples puntos de coagulación que impulsan la contracción y la renovación del colágeno, en distintas profundidades de la piel. “Las zonas más beneficiadas son el contorno de ojos, debido al levantamiento del párpado superior y tensado de las bolsas palpebrales. Es evidente también la mejoría que produce en el óvalo facial, cuello y papada”.
La mejoría es visible durante la aplicación, a las pocas semanas y con el paso de los días más aún, y hasta seis meses después, recomendándose generalmente dos sesiones anuales. “Si bien el HIFU 3D es un excelente método de tratamiento para zonas corporales de extrema flacidez como abdomen, brazos, glúteos, cara interna de muslos o rodillas, en algunos casos donde además hay adiposidad bien localizada, recomendamos métodos como el Ultrashape”.
A diferencia de métodos más antiguos que reducen pero dejan el aspecto de “bolsa vacía o floja”, el Ultrashape destruye las células grasas y al mismo tiempo activa y mejora la circulación sanguínea y el sistema linfático de la zona tratada, logrando resultados duraderos y pudiendo trabajar zonas más difíciles como cintura, contorno de glúteos, pantalón de montar, muslos, espalda, rodillas y brazos.
“Todos estos métodos tienen la ventaja de ser no invasivos, con mínima o nula molestia, sin tiempo de recuperación y extremadamente seguros, siempre que se realicen en consultorios y/o centros médicos con profesionales capacitados”.
Por último, Carolina remarca. “Otra aparatología que los dermatólogos usamos frecuentemente para reparar la piel y es el LASER DE CO2 fraccionado, que trabaja desde su superficie y en mayor o menor profundidad, mejorando la textura, densidad y color del tejido cutáneo, disminuyendo incluso arrugas finas, cicatrices y estrías”.
Conoce más sobre ellos en sus redes de Instagram y Facebook.
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