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Su rostro refleja alivio. Fueron meses de angustia, pérdida de trabajo y dinero. Pablo Rago trabaja en los medios desde que era niño y nunca había atravesado una situación como la que vivió cuando Erika Basile lo denunció por abuso sexual en el mes de diciembre.
Según contó, sólo la había visto una vez y no entendía por qué lo había denunciado. Sin embargo, el actor se llamó a silencio aunque contrató los servicios del doctor Burlando para que lleve adelante el caso.
En diálogo con Catalina Dlugi, y tras la absolución en la causa, Rago confesó que fueron meses muy difíciles y que se le cortaron trabajos, además de sentir mucha presión. "Yo estaba tranquilo porque en mi interior sabía que no tenía nada que ver".
Al ser consultado sobre si va a tomar represalias, el actor contestó, contundente: "Yo no voy a ir en contra de ella. Lamento lo que paso. Es triste pero no tengo ningún rencor".
