¿Cómo y cuándo se fundó? Se fundó en mi cabeza a los 8 años cuando insistí y re insistí a mis padres para que me compren la primera revista de tatuajes en un kiosco de diarios. Fue con esa revista que comenzó mi pasión por esta rama del arte y con ella, mantuve vivo el ejercicio del dibujo durante todos estos años. A los 12 años, fui a hacerme mi primer tatuaje y a partir de ese momento entendí que mi vida profesional iba a estar ligada a este mundo. En el 2006 hice mis primeros trabajos a familiares y amigos, hasta que unos años más tarde pude armar mi propio estudio en el centro de Quilmes, ciudad en la que me crié y aún vivo.
¿Por qué debería elegir un cliente a Michel Tatoo?
La relación cliente-tatuador conlleva un vínculo especial. Frecuentemente es el cliente quien te elige presentándote sus ideas y planteando, así, el desafío de desarrollar un diseño que esa persona llevará de por vida en su piel.
Durante todos estos años siempre he intentado generar diseños únicos y personales para cada cliente que me eligió para tatuarse. Cada estilo que desarrollo trato de estudiarlo al máximo, sobre todo sus características y sus expresiones. De este modo me aseguro que brindo un buen resultado en mi trabajo.
¿Cómo lo ves a futuro?
Sinceramente, intento no preocuparme pensando en el futuro a largo plazo sino que pongo toda mi energía en crecer y perfeccionarme, día a día; ya que estoy convencido de que esa es la mejor manera de seguir avanzando o al menos es lo que me funcionó a mí, hasta ahora.