¿Cómo nació la idea de crear Ramen Factory y qué los llevó a elegir el ramen como eje principal de su propuesta gastronómica?
Luego de un momento complicado —habíamos tenido que cerrar un bazar y los alquileres nos asfixiaban—, decidimos que había que actuar rápido. Yo cocino desde siempre, y se me ocurrió armar una hamburguesería gourmet. Mientras esperábamos el local, empecé a jugar con paquetes de ramen industrial, agregándoles toppings como carne, huevo... y empezamos a soñar. De a poco la idea fue mutando hacia un fast food de ramen. Pero con el tiempo, y gracias a la IA y a un video de Luisito Comunica, empezamos a desarrollar un caldo gourmet, toppings exclusivos, nuestros propios fideos alcalinos y hasta un naruto original de la marca. El primer día fue un desastre (literal), pero con la ayuda del chef Facundo logramos ajustar el mise en place y formalizar la receta. Y ahí explotó todo: el sabor gustó, la gente respondió, y el boca en boca hizo el resto.
¿Cuál fue el rol de la inteligencia artificial en el desarrollo inicial del proyecto? ¿Qué decisiones importantes tomaron con su ayuda?
Desde el diseño de las recetas hasta la distribución del mobiliario, la IA estuvo en todo. Usamos ChatGPT para calcular costos, crear contenido de redes sociales y armar planes financieros. Literalmente todo lo que pudimos automatizar o planear con ayuda digital, lo hicimos. Incluso aprovechamos una promo de tarjetas Supervielle: 12 cuotas sin interés los jueves en Mercado Libre. Con eso compramos vajilla, decoración, implementos de cocina... ¡todo! Fue esperar jueves tras jueves con fe y ansiedad. Y claro, metimos una campaña de publicidad súper agresiva. Los amigos nos decían: “¡me salen sus publicidades por todos lados!”. Apostamos con todo.
¿Qué los inspiró de la cultura japonesa y del animé para trasladarlo a un negocio gastronómico en Córdoba?
Nos mueve lo espiritual, la resiliencia y ese mensaje de “cree en vos aunque todo parezca en contra”. Naruto fue clave. La vimos juntos cuando ya teníamos 22 años, y nos marcó. Ichiraku Ramen es el plato favorito de Naruto, y para nosotros el mensaje fue claro: trabajá duro, sé bueno, creé en vos, y tus sueños se hacen realidad. Parece místico, pero lo hicimos con conciencia y amor.
Antes de Ramen Factory, ¿tenían experiencia en gastronomía o fue una aventura completamente nueva para ustedes?
Nada. Yo cocinaba para reuniones familiares grandes, me gusta hacer ahumados, asados de 12 horas... pero manejar un restaurante, nada que ver. Solo actitud, fe y ChatGPT. Ah, y nuestro chef Facu, que trajo orden y sistema a la cocina.
¿Recuerdan algún momento bisagra que les haya hecho decir “esto va en serio”?
La apertura. Fue caótica. Hicimos tanto marketing que el primer día no dábamos abasto. Solo ofrecíamos take away. No teníamos manos, pero teníamos que pagar las tarjetas. Fue un sacudón. Esperamos haber recuperado la confianza de esos primeros clientes si algo falló.
¿Qué hace único al ramen que ofrecen en comparación con otros locales de comida japonesa o asiática en Córdoba?
No nos gusta compararnos. Admiramos a todos los colegas del rubro. Pero sí sabemos que nuestra propuesta tiene identidad, alma y sabor propio.
La carta incluye opciones sin gluten y veganas. ¿Cómo lograron que la propuesta sea inclusiva sin perder la esencia japonesa?
Buscando proveedores específicos y probando a puro paladar. Queríamos que todos pudieran probar un ramen real sin resignar sabor.
¿Qué platos recomendarían sí o sí para alguien que visita Ramen Factory por primera vez?
El Minato, nuestro ramen cremoso de cerdo. Es tan rico que se me antojó mientras lo escribía, jaja.
¿Qué herramientas de inteligencia artificial siguen usando hoy para gestionar o potenciar el negocio?
ChatGPT a full (tenemos dos suscripciones, una cada uno) y ahora empezamos con Grok y PixVerse, aunque todavía no pagamos el premium. Nos ayudan a crear contenido, organizar tareas, incluso proyectar.
¿Cómo imaginan el futuro de Ramen Factory? ¿Hay planes de expansión o nuevas tecnologías en camino?
Sí, ya tenemos una visión clara: crear el Factory Universe, un gran restaurante con todas nuestras marcas adentro. Ya abrimos dos nuevas propuestas en dark kitchen: Sushi Factory y Wurst by Factory (panchos alemanes con recetas internacionales). También estamos gestando Chicken Factory. Todo pensado para romper con lo tradicional del delivery en la zona norte de Córdoba: lomitos, milanesas, pizzas. Queremos mostrar que se puede innovar, que las tarjetas no son el enemigo si sabés usarlas, y que con fe y perseverancia, los sueños se cumplen.
Dirección: Recta martinolli 8532
Instagram: @ramenfactory_cba, @sushifactory_cba, @wurstbyfactory_cba
Tiktok: @ramenfactory_cba
Telefono: +54 9 351 736 1671






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