La China Suárez arribó a la Argentina con sus tres hijos y se retiró de Ezeiza con custodia, sin hacer declaraciones. Ahora deberá enfrentar a la prensa de nuestro país por el triángulo amoroso vía chats que se origino con Wanda Nara y Mauro Icardi de quien recibió y le envió mensajes.
Tras su inminente llegada, Eugenia decidió refugiarse en dos de sus amigos más incondicionales en Baires y así lo reflejó en sus redes sociales donde compartió imágenes del encuentro.
“Primera parada obligatoria”, escribió la expareja de Benjamín Vicuña, quien a pesar de querer estar más días en Madrid se vio obligada a volver por el pedido de los padres de sus hijos, el actor chileno papá de Magnolia y Amancio y Nicolás Cabré de Rufina.
En la foto que publicó hace algunas horas en su cuenta de Instagram, y que ya tiene más de 140 mil likes, la China está acostada en un sillón junto a Marcelo La Torre, de la tienda de alimentos orgánicos “Pura Vida”, y Guillermo Lynch, propietario de una casa en el exclusivo country Cumelén, en Villa La Angostura, donde se alojó la actriz junto a Vicuña y sus hijos un mes antes de separarse.
La China Suárez y el contundente mensaje a poco de regresar al país
La China Suárez volvió al país y enfrentó a la prensa que la esperaba en Ezeiza después del escándalo con Mauro Icardi y Wanda Nara.
La actriz de 29 años estuvo más de un mes en Madrid, donde se dedicó al rodaje de una nueva película con Álvaro Morte, y volvió junto a sus tres hijos, Amancio, Magnolia y Rufina y su mamá, Marcela Rivero.
Tras su regreso después de la polémica por el wandagate, la ex de Benjamín Vicuña compartió un sugestivo posteo en su cuenta de Instagram.
“Fuck normal, I want magic (Al carajo la normalidad, quiero magia)”, fue la frase que compartió la China que pertenecía a una publicación que hizo Britney Spears días atrás.
FL