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Después de casi tres meses esperando a ser repatriada junto a su familia desde Miami, Floppy Tesouro (34) pudo regresar a la Argentina y sigue la cuarentena en su piso 43 de Puerto Madero, junto a su hija Moorea (3) y a su esposo, Rodrigo Fernández Prieto.
“Las dos o tres veces que estuvimos casi arriba del vuelo, por un tema de prioridades perdimos la posibilidad. Éramos un grupo grande, nos dividimos en tres departamentos y teníamos la suerte de tener salud, techo y comida. Pero igual fue complicado, porque no es lo mismo estar afuera. Finalmente un amigo de Rodrigo que viajó a Miami con su avión, nos trajo a todos de vuelta. Si no era así, quizás aún estaríamos esperando”, detalla Tesouro, quien dice vivir una etapa de gran conexión con su hijita.
“Somos dos niñas jugando todo el tiempo. Siempre fuimos muy compañeras, pero esta cuarentena nos unió aún más. Yo soy muy trabajadora, amo lo que hago y eso me llevaba a estar afuera por horas. Así que me dediqué a conectar con ella mucho más y me encanta, porque la disfruto muchísimo”, admite la modelo y actriz. Con una sonrisa, también reconoce que Moorea resultó tan coqueta como ella. Tanto, que el vestidor se convirtió en otra zona de juego para madre e hija.
“Creció viéndome trabajar y que me maquillen y peinen, porque a sus seis meses volví al ruedo. Muchas veces fue conmigo a los canales, así que es muy coqueta y ahora tiene la etapa de querer copiarme. Hace un año que empecé con ‘soy Floppy Tesouro’ y entonces se prueba mi ropa y mis zapatos. También elige sus propios looks. Es más, para esta producción, Moorea quiso maquillarse y peinarse por primera vez para una nota. Se encargó mi maquillador, así que ella estaba feliz. Con mi hija saltamos, charlamos y tomamos el té. También cantamos y jugamos a las amigas y a las modelos”, asegura Tesouro, fascinada con el histrionismo y la simpatía de su heredera, quien ya le dijo a su mamá qué de grande “quiere ser cantante”, confiesa Floppy con orgullo.
“Hasta la reconocen en la calle, le piden sacarse fotos y a Moore le encanta. Yo estoy babosa de verla como quiere actuar y desfilar. Iba a clases de baile y las extraña porque me pregunta cuándo va a volver, por más que ahora las hacemos online al igual que el jardín”, puntualiza la expanelista de “Incorrectas”, ciclo de América que se pausó debido a la pandemia del coronavirus.
“Me pareció una buena decisión. Todavía no se sabe si retomamos. Si vuelve estaré firme porque me encanta el programa y hacer televisión. Mi gran proyecto a futuro y para lo que trabajo todos los días es tener mi programa propio y ser conductora. Para eso estudié periodismo. Actualmente estoy muy abocada al fitness en redes sociales y lancé mi propia app, que se llama Floppy Fitness, donde están mis entrenamientos online”, afirma Tesouro.
–¿Cómo se encuentra su vida en pareja tras haberse reconciliado con Rodrigo meses atrás?
–Estamos bien, con la casa en orden. Nos fortalecimos como pareja después del lapso de la separación de cuatro meses que tuvimos. Decidimos volver desde otro lugar, con la maduración que yo necesitaba de parte de “Rodri”. Me dejé reconquistar. Yo pasé por una etapa que realmente consideraba que mi separación era definitiva y después, bueno, la vida te sorprende. Los cambios que genera el otro te dan las ganas y el entusiasmo de darle otra posibilidad. Honestamente, creo que todo sucede por algo y que lo mejor que es dar una oportunidad a la pareja y a la familia. No nos estábamos encontrando en ese momento y fui honesta con lo que me pasaba y Rodrigo fue muy caballero y dio un paso al costado. Nos sinceramos y después, como yo soy muy pasional y Susanita, me dejé reconquistar. Y la pandemia, además, nos conectó mucho como familia.
–¿Siente deseos de volver a ser madre?
–Si fuese por Rodrigo ya tendríamos tres hijos (risas) Yo soy la que, al disfrutar mucho a Moorea, no piensa tan así. En un momento sentía que era mejor tener hijos todos seguidos porque “te acomodás”, como dicen. Pero después pasa que querés descansar un poco, conectar con tu hija, disfrutar. Yo trabajo con mi imagen y eso tampoco es un dato menor. Porque si bien en mi embarazo aumenté 16 kilos y no me importó, y por suerte al tener buena genética a los dos meses estaba igual o mejor, hay que tener en cuenta que es un parate de año y medio desde que transitás el embarazo y tenés a tu hijo. Pero sí quiero darle un hermano a Moorea el día de mañana, porque al ser hija única quiero que ella tenga ese vínculo con hermanos que no conozco. Quiero tener varios hijos, pero van llegar cuando deban. Hoy siento que puedo esperar.
Producción y estilismo Sol Miranda Fotos Fede De Bártolo - Agradecimientos Floppy Tesouro. Make up Hairstyling Kenny Palacios Marimba by Venska, Ab Importados,Wearmic Melissa Argentina, Baby Kids Point, Pañata Oficial, Para sentarte Bajito.
