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El pasado 19 de noviembre, Adele lanzó su cuarto álbum de estudio, “30”. El primer disco en seis años fue promocionado con su nuevo single “Easy on Me”, y trae un nuevo mensaje para todos sus fanáticos: quién soy, qué quiero en la vida, qué busco en el amor, qué me hace salir adelante y cómo se puede afrontar y lidiar con todo ese sentimiento en conjunto.
Lo nuevo de Adele, no solo trae un mensaje pospandemia, sino que está marcado por la biografía sentimental de la cantante. El nuevo álbum de la artista de 33 años, tardó tres años en publicarse, y esto se debe, además de la pandemia, al caos que vivió en los últimos años.
En 2017, Adele se quebró por completo, y no solo por el quiebre que sufrió su voz, sino que la artista vivió ataques de ansiedad. En abril de 2019, la británica y su pareja Simon Konecki, anunciaron su divorcio. Su relación comenzó en 2011, y fruto del amor nació Ángelo. Se casaron en 2018 y al poco tiempo se separaron. En los últimos años, Adele estuvo negociando su divorcio mientras que preparaba su nuevo disco.
Hace algunos meses, la cantante británica y Konecki llegaron a un acuerdo definitivo, y este incluyó una cláusula que podría hacerle perder millones de dólares a Adele. Según Vanity Fair, la intérprete de “Someone Like You” no puede cantar sobre Simon Konecki, ni inspirarse en él para sus canciones.
La cantante que logró bajar 45 kilos, acaba de lanzar un nuevo álbum, y sigue la línea de contar su biografía sentimental. “30” es un disco que habla sobre el divorcio, en el sentido que es una estrofa más en las canciones sobre la vida.
Los detalles del millonario y polémico divorcio de Adele:
Tras dos años de batalla, Adele y Simon Konecki, su pareja durante siete años y padre de su hijo Angelo, sellaron finalmente su divorcio.
Según The Sun, la pareja, que se casó en 2016, no firmó ningún acuerdo prematrimonial, por lo que Konecki, nacido en Estados Unidos, tendrá derecho a la mitad de la fortuna de la cantante, que se estima en 150 millones de libras esterlinas, es decir, 8.304 mil millones de pesos argentinos.
Lo cierto es que el divorcio le restará a Adele unos 86,5 millones de euros de su fortuna, que se llevará Konecki. Los medios británicos afirman que la artista, vendió en febrero una de sus casas en Sussex (Reino Unido), valorada en 3 millones de libras y que en enero, una de sus propiedades en Los Ángeles, valorada en más de medio millón de dolares.
Además, Adele tiene una mansión de 8,4 millones de euros en Beverly Hills y una inmensa propiedad valorada en 8,5 millones de euros en el exclusivo barrio londinense de Kensington, más un piso de 1,7 millones de euros en el sur de la capital británica.
FF
