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Letizia Ortiz se presentó junto a su esposo, el Rey Felipe, en la recepción anual al Cuerpo Diplomático acreditado en España con motivo del nuevo año y causó sorpresa entre los presentes por salirse del protocolo.
Letizia se mostró muy cálida en el evento y, luego de los múltiples apretones de manos, se dio cuenta de que la pulsera de diamantes que llevaba puesta se le había desprendido de la muñeca. Fue entonces cuando la Reina no dudó en agacharse ella misma a agarrarla, causando gracia entre los presentes y saliendo del protocolo. ¿Lo más sorprendente? Es la segunda vez que le ocurre el mismo percance y utilizando el mismo vestido azul marino con escote en pico terminado en botonadura en la parte delantera, lazada en la cintura, manga larga y falda de vuelo.
Con dos años de diferencia, mismo vestido, mismo percance
La primera vez que Letizia se mostró con este look fue en enero del año 2022 durante la celebración de la Pascua Militar. La monarca llevaba puesto el dichoso traje con un tapado negro encima, cuando se le desprendió del brazo una joya muy importante para la realeza, ya que pertenece al lote de pasar. La pulsera tiene “un broche con perla grande gris pálido rodeada de brillantes y del cual cuelga una perla en forma de pera“, tal como dejó escrito la Reina Victoria Eugenia en su testamento. La diferencia es que en esta ocasión fue su esposo, el Rey Felipe, el que se agachó rápidamente a agarrar la joya que llevaba Letizia.
No se sabe la firma del ya icónico vestido con el que la Reina Letizia protagonizó las dos situaciones similares, pero es claro que la favorece mucho aunque, por ahora, venga acompañado de esta “maldición”, como comentan muchos usuarios en redes sociales.
F.A
