A una semana de su cumpleaños numero 37, se filtró la insólita información. Desde que Meghan Markle se casó con el príncipe Harry se tuvo que adaptar a ciertas normas estipuladas por la familia real británica y modificar su vestuario entre otras cosas.
Para cumplir con las exigencias de la reina, la ex actriz debió renunciar a cosas como usar faldas cortas, usar redes sociales, sacarse selfies o simplemente usar las uñas con colores oscuros.
Lee también: Meghan Markle fue amenazada por su propia hermana
El ex chef de la familia real, Darren McGrady reveló que la reina prohibió la pasta en el menú del Palacio de Buckingham ya que no le gustan los alimentos con almidón, pero lo que se supo es que la Duquesa es fanática de este plato de origen italiano.
La monarca también evita las papas y prefiere una dieta rica en proteínas y vegetales en estación. A pesar de ser un enorme sacrificio para Meghan, también se puede decir que coinciden en muchos otros gustos gastronómicos.
Ambas optan por una dieta saludable. A la reina le gusta comer la banana cortada en finas rodajas con tenedor, entre otras exquisiteces . Mientras que la Duquesa, opta por tener una dienta casi vegana con algún que otro permitido.