En una entrevista con "la sexta", Leo Messi, confesó que a veces le gustaría ser anónimo para poder llevar una vida más normal junto a su familia.
No todo lo que reluce es oro, reza un reconocido refrán, el que podría aplicarse perfectamente a la vida de Leo Messi quien, en diálogo con el periodista Jordi Évole, luego de hablar sobre sus planes futbolísticos a futuro y la idea de viajar a los Estados Unidos, tuvo un espacio muy especial al referirse a su esposa, Antonela Rocuzzo y a sus 3 hijos: Thiago, Mateo y Ciro.
Fama, dinero, amor y éxito son en Leo una muestra clara de que a veces no significan que se tiene todo. Las cosas simples que cualquier ciudadano de a pie puede realizar con total naturalidad, para el Crack del Barcelona, son absolutamente imposibles.
En un momento de la charla Leo Messi aseguró: "Me gusta estar con mi familia y más aún cuando hacemos algo relacionado al deporte", comenzó su relato que paulatinamente fue llegando a su lado más sensible. "Disfruto todo y tengo la gran suerte de poder pasar mucho tiempo con ellos", siguió y en otro segmento de la entrevista dijo pícaro y sonriente: "Los chicos se pasan todas las noches a nuestra cama".
También aseguró que le encanta compartir los juegos de consola pero en ese momento de la charla, sorprendió con una confesión inesperada: "A veces me gustaría ser anónimo y poder ir al supermercado, al cine, a un restaurante sin tener 300 ojos que miren lo que estás haciendo", y Leo Messi agregó: "Soy un privilegiado pero a veces me gustaría pasar desapercibido".
Más allá de eso, Leo dijo que su vida es bastante normal y muchas veces aburrida. y cuando intenta ir al supermercado, algo que le gusta mucho, se junta mucha gente y se le complica. También dijo que Antonela le recomendó que vaya a un psicólogo, pero hasta el momento no tomó la decisión.
Leo Messi está en Barcelona desde que tiene 13 años. Vivió más en España que en Argentina y es consciente de que el club le dio todo y que lo formó tanto como jugador y como persona, y también él le dio todo a ese club que lo llevó a la fama mundial