Adriana Salgueiro recibió un reemplazo total de cadera (RTC) de cadera luego de que su fémur se facturara tras tropezarse en la calle en el día de ayer. Así lo confirmó a Caras Salud el médico encargado de la intervención, Ricardo Munafó.
Munafó, quien se desempeña como Jefe de Traumatología del Sanatorio Trinidad Palermo y es también director del programa de Cadera de CETEA, señaló en diálogo con el doctor Guillermo Capuya que se optó por una prótesis, “porque el tipo de fractura que presentó comprometía la vascularización, que es la sangre que va a la cabeza del fémur”. En ese caso, “si se realizara una operación clásica en la que se colocan tres clavos, esa cirugía fracasaría, porque en seis meses podría producirse una necrosis en la cabeza de fémur y tener la necesidad de una nueva intervención quirúrgica”, añadió. Además, “al colocar un reemplazo de cadera los pacientes se recuperan infinitamente más rápido, ya que caminan al otro día, a los 15 días se le sacan los puntos y a partir de entonces, mediante un programa de rehabilitación rápida, se busca que se reinserten socialmente de la mejor manera, por lo que a los 30 días ya llevan una vida completamente normal”, detalló el especialista.
Munafó explicó que la cirugía reemplaza las dos superficies articulares que corresponden a la articulación de la cadera: parte de la ‘cabecita’ del fémur fracturada se sustituye con otra de cerámica. A su vez, se coloca un material, precisamente un polietileno de última generación, donde va a trabajar y a friccionar la pieza de cerámica.
Por último, los componentes metálicos de la prótesis son de titanio. “Con mi técnica, la cirugía es de 40 minutos, más el tiempo que lleva la anestesia. Por lo que la duración total desde que un paciente entra hasta que sale del quirófano es de entre 60 y 90 minutos”, señaló. Mientras que el programa de rehabilitación rápida, que nació en EEUU ante la necesidad de acortar la internación de los pacientes, permite que los receptores no sólo caminen al día siguiente de ser intervenidos, sino que también vuelvan a su hogar luego de tres o cuatro días.
“En la casa comienza la fase inicial para recuperar la actividad de levantarse, vestirse, ir al baño, cocinarse y recostarse. Cuando le sacamos los puntos, luego de 15 días, comienza la reinserción a la vida normal, donde puede, por ejemplo, manejar”, añadió. Para lograr que los pacientes se recuperen rápidamente sin la necesidad de que permanezcan en una institución “lo que se hace es realizar durante la cirugía una incisión que no corte músculo, sino que esté entre los músculos”. Con esta acción “puedo autorizar al paciente a bajar y subir escaleras al día siguiente, y en los casos en que se dan bastón o muletas, son solo a simple efecto de que el paciente tome confianza por un término de 10 días”, detalló el experto.
Por cada tres mujeres que se fracturan, sólo un varón lo hace. Para que ocurran este tipo de lesiones juegan dos factores: la intensidad de traumatismo o caída y la calidad del hueso. “Si una persona tiene una caída desde un primer piso, se va a romper la cadera más allá de tener huesos fuertes. Pero si se cae de un escalón o tropieza, tienes más chance de fracturarse si sufre osteopenia, que habitualmente aparece en las mujeres a partir de determinada edad”, indicó. Por último, Munafó indicó que este tipo de lesiones “son más frecuentes en pacientes de entre 55 y 60 años si sufren osteopenia u osteoporosis, o si no la sufren, a partir de los 75 a 80 años”.