Reveladoras declaraciones de Benjamín Vicuña sobre su escandalosa ruptura con Pampita

Tras diez años de relación, la historia de amor entre Pampita y Benjamín Vicuña terminó de la peor manera: en medio de un escándalo en donde la modelo encontró a la China Suárez, actual pareja del galán chileno, intimando en las grabaciones del filme, El hilo rojo.

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Si bien la polémica entre la expareja duró un tiempo considerable, lograron mantener un vínculo cordial por sus hijos, Benicio, Bautista, y Beltrán.

A tres años del escandaloso final, fue Vicuña quien decidió romper el silencio y habló sobre la polémica separación en una nota exclusiva que le dio a Caras Chile.

“Fue horrible. Por supuesto que en algunas cosas me equivoqué, y otras fueron muy injustas que generaron mucho dolor y miseria. No existe un listado de aprendizaje, hay cosas que vas entendiendo desde el cuerpo, que asimilas de a poco. Hoy ya sé lo que no quiero y entendí que hay situaciones que no puedo cambiar y otras que escapan de mi control y responsabilidad. Cada persona tiene una historia, con la diferencia que la mía se hizo pública, lo que me avergüenza y molesta. Al parecer es parte del paquete. Intento preservar lo que se pueda y otras escapan de mis manos”, aseguró Vicuña.

Sobre la experiencia y la posible lección que esto le dio, Vicuña aseguró: “Que en la vida puedes hacer muy feliz a otro y también hacer daño o que te dañen. Lo importante es distinguir, darte cuenta, establecer criterios y aprender de eso. Todos nos equivocamos. Fue un período complicado”.

El actor reveló que el ser llamado "infiel" impactó mucho en su imagen y las criticas se hicieron sentir. “De lo que se dijo no iba a salir a cuestionar ni a defenderme porque eran temas sensibles y delicados. Esperé que las cosas decantaran. Me importa la opinión de mis hijos y punto. Las versiones que se dijeron ya están, no me puedo hacer cargo, son parte de los mitos urbanos. Me separé como cualquiera, con el dolor y la frustración que significa, añadiendo esos ingredientes externos. Me concentré en transitar en eso… ".

Por último, reflexionó: "Mirando hacia atrás, los dolores no se restan, se acumulan. Se murió mi hija, a los dos años me separé. Sin embargo, el ser humano tiene la maravillosa posibilidad de la resiliencia, de un renacer. Hoy me hago cargo de todo lo bueno y lo malo; tengo una familia maravillosa que es clave, una mujer increíble, alegre, sana, a quien me unen muchas cosas”.