Galería de fotos
Compartí esta nota
Son compañeras y también aliadas a la hora de compartir "looks". Como si fuera un juego más junto a su madre, Antonia Macri volvió a divertirse entre vestidos y zapatos. Juliana Awada y su hija acompañaron a Mauricio Macri en el acto de inauguración de la 150º edición de la Exposición Rural en Palermo y su vestuario volvió a despertar elogios. No sólo por la acostumbrada elegancia de la Primera Dama, sino por la complicidad entre ambas al compartir un estilo tan invernal y apropiado como "trendy".
El sábado 30, minutos antes de las 11 am, Juliana ingresó al palco principal ataviada con pantalón y polera negros y un chaleco de piel sintética marrón, con bordes y lazo de cuero negro y zapatos clásicos, bajos y con punta redonda. Todo by "Awada", la marca de indumentaria que pertenece a su familia. Para resaltar su belleza, la esposa del presidente volvió a apostar a un suave make-up y peinado recogido del tipo “pin-up” o “sixty”, tendencia que apasiona a Juliana. Y, en composé con su madre, Antonia lució un vestido que heredó de su hermana mayor, Valentina Barbier, en color gris que acompañó con un chaleco de piel sintética y cinturón, en la misma paleta de colores elegida por Juliana.
Mientras su padre hablaba a los presentes, la nena se entretuvo mirando a los animales ganadores que estaban en la pista y le hacía comentarios a su mamá en el oído. Convertida en toda una damita y dueña de una excelente conducta para los actos oficiales, la pequeña vivió un momento muy tierno y divertido cuando Macri bajó de la tribuna a saludar a un equipo de equinoterapia que pasó desfilando. Mauricio la llevó de la mano y, sin despegarse de su hija, la ayudó a acariciar a uno de los caballos que estaba acostado en el suelo y que despertó cariño en la nena.
