Fue una noche que combinó solidaridad, arte y celebrities. ALPI —Asociación Civil, dedicada a la rehabilitación neuromotora— festejó su Charity Ball en el marco de una noche de ballet y expresiones artísticas de nivel internacional. El evento se llevó a cabo en el salón Frers de La Rural y Carolina “Pampita” Ardohain fue una de las invitadas especiales y deslumbró con un vestido color obispo de Carolina Herrera. Ignacio Viale, quien lució impecable con un smoking negro, llegó con su abuela Mirtha Legrand y se ubicó en una de las mesas principales del salón ambientado por Javier Iturrioz.
Luego del breve romance que mantuvieron a principios de este año continuaron su amistad a pesar de que evitan mostrarse juntos. En un momento de la gala él se acercó a la mesa de Pampita para saludarla. Los dos se mostraron felices por el encuentro y charlaron animadamente durante un largo rato mientras el resto de los invitados los observaban con curiosidad. En un gesto cómplice y amigable, la modelo posó divertida con dos amigas que la acompañaban mientras Nacho les tomaba fotos con su celular. La velada transcurrió en un clima de alegría y se los vio muy felices. Hubo abrazos, susurros y sonrisas cómplices. Los Petersen Cocineros deleitaron con un menú exquisito acompañado por champagne de Bodegas Chandon. Todo lo recaudado durante la noche se destinó a la construcción de su Centro de Internación y Rehabilitación Pediátrico. Pampita disfrutó embelesada de la pieza clásica La muerte del Cisne —en un tándem de vanguardia junto a Lil Buck (International Ballet Artist) y Carolina Basualdo (Ballet del Sur), que mezcló la danza callejera con el ballet-; Carmen —que unió la danza norteamericana y la cubana en un mismo escenario— y El lago de los Cisnes, a cargo de dos eximios exponentes del Teatro Colón. Cuando llegó la hora de retirarse, Nacho lo hizo junto a su famosa abuela y Carolina con sus amigas. Sólo el tiempo dirá si esa amistad puede convertirse en amor.