Después de una temporada teatral que los encontró en Mar del Plata con “El Otro Lado de la Cama”—el éxito teatral que protagonizan desde hace tiempo— Gimena Accardi (31) y Nicolás Vázquez (39) emprendieron su tan deseado viaje con destino al Caribe. La pareja, que se casó en diciembre pasado, también viene de sobrellevar la pérdida del hermano del actor, Santiago, quien falleció días después de la boda y poco antes que el matrimonio iniciara sus funciones en la ciudad balnearia. Tras meses de trabajo intenso y de demanda emocional, tanto el descanso frente al mar como un tiempo a solas resultaba, para ambos, necesario y merecido.
Fascinados con su Luna de Miel, Gimena y Nico se embarcaron rumbo a las islas Bahamas, previo paso por el aeropuerto de Miami, donde la actriz vivió un momento muy especial. “Estuve sentada al lado Joe Jonas en el aeropuerto de Miami y me sentí un poco adolescente por conocerlo. No le saqué foto. No”, contó Accardi divertida, en su cuenta de Twitter. Horas después, ya instalada en un espectacular resort y en una suite con vista al oceáno, compartió diferentes postales del lugar, entre ellas, una en la que ve a la pareja muy acaramelada en una reposera y otra donde la actriz posa sonriente dentro de una cueva artificial de la piscina.
“Mi mejor compañero de viaje”, escribió también Gimena junto a otra foto del viaje, ya junto a con su esposo bajo una cascada, en la pileta del hotel. Entre caminatas por la playa, momentos contemplativos en un muelle y el relax absoluto de una siesta en hamacas paraguayas, que los actores alternaron con divertidas sesiones de paddle surf, la estadía resultó espléndida para ellos.
Ya después de disfrutar del mar cristalino y la arena blanca de Nassau, la pareja retornó a Miami, donde continuó con su descanso. Instalados en South Beach, volvieron a hacer playa, donde no faltaron el mate, las risas y las extensas charlas que adoran mantener sobre el atardecer, y también recorrieron Lincoln Road, un infaltable de todo viaje a la ciudad. “No somos la pareja infalible, no queremos vender perfección. Tan solo nos resulta simple ser así: nos queda fácil amarnos. Vivimos un amor sin leyes, reglas y prejuicios. Sentimos que hemos estado unidos desde otras vidas, pero no decretamos que moriremos juntos. Una gran clave es vivir este amor sin titularlo, sin obsesionarse porque debe funcionar. Siempre dormimos de la mano y eso tiene más valor que tener sexo cinco veces seguidas”, confesaron tiempo atrás. Cada día más enamorados, fueron sus abrazos, juegos y reiterados besos en el mar lo que otra vez confirmó una pasión que tras casi diez años de amor sigue tan intensa como en los primeros tiempos del romance. A su regreso, la pareja comenzará con su gira teatral por el interior del país, con energías repuestas y una química siempre en alza.
Fotos: Esmeralda Velazquez