Susana Giménez deberá enfrentarse a un nuevo litigio judicial, después del escándalo por la aparición de supuestos videos hot de su nieta Lucía Celasco.
Según información exclusiva a la que accedió CARAS, la asistente de la diva, Inés Hernández, con el patrocinio de Juan Alberto Triberio, llevaron adelante una medida cautelar contra Google, Facebook y Yahoo para impedir que difundan las presuntas imágenes de la joven.
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Tal como explicó Fernando Burlando, además de esta medida, el juzgado de Garantías Nro. 5 del Deptarmento Judicial de La Plata avanzó en su investigación en la que se intenta desmantelar una "red de hackers" que utilizan la extorsión como modus operandi.
Mientras tanto, el periodista Pablo Silva sigue como principal imputado en esta causa, tal como lo describió el abogado.
Silva fue la primera persona que recibió estos videos y quien dio aviso a la asistente de Susana para mantenerla al tanto de su existencia, aunque ahora está señalado como sospechoso para la Justicia.
"Pedí el contacto de Inés (Hernández) y charlé por WhatsApp con ella. Me presenté, le dije que no estaba trabajando en un medio y que nada me movilizaba para explotar este material como sí pude hacer en otro momento. Ella me preguntó cuánto pedían y yo me remití a decirles el precio que me pedían a mí", contó el periodista en diálogo con Clarín.
De acuerdo al relato de Silva, la persona que se puso en contacto con él pedía 8 mil dólares a cambio de la información.