jueves 05 de diciembre del 2024
ACTUALIDAD 04-04-2018 11:05

Sigue la polémica: estalló la guerra en la familia Maradona

La ausencia de Diego a la boda de su hija despertó un nuevo enfrentamiento en el clan. Enterate de los detalles. Galería de fotosGalería de fotos

fbl-uae-friendly-fujairah-fc-ahly
fbl-uae-friendly-fujairah-fc-ahly |

Fue un fin de semana lleno de festejos familiares para Diego Maradona (57), aunque casi todos los vivió a la distancia. Desde ya que el más destacado fue el casamiento de su hija, Dalma (31), al que después de muchas idas y vueltas, finalmente el ex futbolista no asistió.

En medio de una incertidumbre total y bien al estilo maradoniano, el ex DT de la Selección dejó abierta la incógnita de su presencia hasta el último minuto. Incluso desde su entorno más íntimo afirmaban que probablemente no sería parte de la celebración, hecho que finalmente fue así.

Lee también: Claudia habló de la ausencia de Diego y reveló un conmovedor detalle de Dalma

Su abogado, Matías Morla, explicó que el ídolo no viajaría desde Dubai a Buenos Aires por expreso pedido del jeque Maktoum bin Hamad bin Mohammed Al Sharqi, gobernador desde 1974 del emirato de Al Fujairah y dueño del club homónimo. Es que aunque tenía que abordar el vuelo de Emirates en la noche del viernes 30 de abril rumbo a la Argentina, finalmente primó el objetivo deportivo, ya que el sábado 31 jugaba un partido clave por el ascenso a la Primera División, que finalmente ganó.

“Las muertes, los nacimientos, no pueden preverse. Pero una boda sí”, fue la contundente frase que le pronunció el Jeque a Morla. “Hubieran armado la boda fuera del campeonato”, sentenció.

Ante semejante presión, ni siquiera pesó el reciente viaje de Dalma a Dubai en enero para negociar con su padre, quien le había prometido hacer lo posible para asistir. El factor Rocío Oliva ya no parecía pesar (ambas estaban peleadas e incluso Dalma había denunciado a la novia de su papá en la Justicia por supuestas amenazas), pero no hubo caso. El desconcierto fue tal que Dalma ya le había comprado el traje para la boda a su papá y hasta habían tramitado una autorización para que aterrice en helicóptero en las inmediaciones de “La Herencia” de Pilar.

Llamó la atención el silencio stampa de Maradona mientras transcurría la boda de su hija. La voz oficial de Diego fue su Instagram, donde tiene un millón y medio de seguidores. El domingo 1, sólo se remitió a hacer una crónica de la gran victoria de su equipo: “Para los que me piden que solamente hable de fútbol, les cuento que ayer ganamos un partido CRUCIAL para conseguir el ascenso a Primera División. Un día antes habían ganado el Baniyas y el Kalba, y nosotros quedábamos terceros en la tabla, con un partido menos. Así que ayer teníamos la obligación de ganar, porque sólo clasifican los dos primeros. Y ustedes saben cómo son las últimas fechas de un campeonato, aparecen las “valijas” por todos lados, y aquí no es muy distinto al resto del mundo. Acá la incentivación económica es igual que en todas partes. Pero con Luis Islas hablamos con los jugadores en la semana, les dijimos cómo son las cosas, y en el segundo tiempo jugaron un partidazo. Les puedo asegurar que hacía tiempo que no veía jugar tan bien a un equipo, y atacar de este modo. Esto es mérito de los jugadores, pero también hay un trabajo nuestro muy grande, detrás. Estoy muy contento, a pesar del sacrificio, seguimos enfocados en nuestro objetivo. Les mando un saludo a todos, les deseo felices pascuas, y quiero decirles que yo puse el cuerpo y el corazón jugando para la selección argentina. Les mando un beso!”.

Hasta entonces, sólo deporte, nada de vida personal. Pero la novedad llegó y no tuvo que ver con Dalma, sino con el nacimiento, el domingo 1, de su segundo nieto, Diego Matías Maradona, hijo de Diego Jr. (31) y su mujer italiana, Nunzia Pennino.

“Les cuento que hoy nació mi nieto Diego Matias Maradona, pesó 3 kilos y medio, y es hermoso. Estoy muy feliz y me llena el corazón. Lo voy a disfrutar como no lo pude hacer con mi hijo Diego. Bienvenido DIEGUITO MATIAS, el integrante más chiquito de la familia”, posteó el ídolo, hasta entonces sin hacer ninguna mención a la boda de su hija.

De hecho, su community manager, la modelo colombiana Jessica Hurtado, compartió en su cuenta de Instagram el festejo de Pascua del “10” con Rocío a bordo de un yate. Hubo foto y video de Maradona tomando cerveza y hasta tirándose el agua de mortal. Hasta entonces, el crack no se había referido a Dalma y que participara de esos posteos parecía, de mínima, una cargada. “Así terminamos el día de Pascua y la ganada de Fujairah. Con mucho amor”, escribió Hurtado.

Fue recién al día siguiente, el lunes 2 de abril, Día de los Veteranos de la Guerra de Malvinas, que el crack se refirió a la boda de Dalma, a propósito del día de cumpleaños de hija: “Hoy es el cumpleaños de mi hija Dalma. No pude estar en su casamiento, pero ella sabe por qué no pude estar. Yo le expliqué a ella y está todo más que bien. Le deseo que sea muy feliz, y le mando un beso tan grande como las Islas Malvinas”, confesó, dando la cara.

Pero lo mejor estaba por venir. El martes 3, Maradona eligió el programa de América TV, “Intrusos”, para despacharse contra Claudia Villafañe (56) y dejar aún más en evidencia una interna de larga data. “Fíjate dónde vivía Dalma y dónde compro ahora. Pregúntale a la madre cuánto puso”, dando a entender que él le pagó el departamento y también la fiesta de casamiento. Furioso, hasta atacó al novio de Claudia, Jorge Taiana, a quien apodó de “Ardente”, porque según explicó Jorge Rial, “se prendió fuego” luego de la aparición de una foto junto a Leonardo Cohen Arazi, ex PR de Ricardo Fort y quien está vinculado a la causa de pedofilia del club Independiente. “Yo les avisé quién era”, disparó Diego, quien además dijo que “no tiene un recibo de sueldo para mostrar ni de ´Casa Tía´”.

Respecto a si le avisó a Dalma de su ausencia, explicó: “Le dije que si podía iba, pero justo nos jugábamos la vida con 30 familias. Dejarlos no podía. Tenía que trabajar por esas familias, para darles de comer”, dijo refiriéndose al plantel del club que dirige. “Me hubiese gustado estar con mi hija y entrarla del brazo, orgulloso como estoy de Dalma (…) ¿Por qué no esperar tres semanas más? Cuando mi hija vivía hace cuatro años con Andrés”, concluyó.

Lejos de quedarse callada, Dalma respondió a cada una de los dichos de su padre. “La casa me la compré yo. (…) Mi papá no pagó un peso del casamiento. Me da vergüenza aclararlo. (…) El me dijo siempre que venía. (…) No sé si me duele o no, es algo que tengo que hablar sola con él”. ¿Quién tendrá la última palabra?

Por Diego Esteves

Informe: Delfina Ortega Nodar.

Galería de imágenes