Los primeros días del mes, Paula Chaves daba a luz a su tercer hijo. Tras el nacimiento de Olivia y Baltazar, el 5 de julio nacía Filipa, un parto al que ella denominó como "Mágico e intenso".
El tránsito del embarazo de la mujer de Pedro Alfonso, estuvo guiado por una partera, Edith Diez, quien dio a conocer los detalles de las nueve lunas de Paula.
La primera hija de Chaves nació por cesárea en tanto que el segundo fue por parto natural al igual que este último en el que contó con el acompañamiento de la profesional en cada una de las etapas: "PVDC significa parto vaginal después de cesárea y para que esto ocurra tiene que haber un deseo materno de querer atravesar un parto después de una cesárea, lo que le ocurrió a Paula con el nacimiento de Oli" comenzó su relato y continuó: "La cesárea es un escenario frío de un quirófano a diferencia de un parto natural mágico e intenso".
La profesional dijo que para esto se debe indagar mucho sobre las preferencias de la mujer.
"Paula tuvo todas las experiencias: Una cesárea innecesaria con su hija, luego el PVDC con Baltazar, con un trabajo de parto muy largo y este último ella quiso que sea más autónomo y con menos intervenciones" y agregó: "Fue una experiencia enriquecedora"
También aseguró "Me gusta poder encontrar la llave que le puede servir a la mujer para poder desplegar la magia del cuerpo en el trabajo de parto."
En otro fragmento de la charla Diez dijo: "Ella hizo un tránsito interno y se pusieron sobre la mesa todos los miedos, fortalezas y debilidades. Junto a su pareja, el día del nacimiento, recorrimos la casa, en un ambiente de gran intimidad y calidez usando elementos y con música de fondo".
"Al llegar al sanatorio, rompió la bolsa de líquido amniótico naturalmente y, a las 23 hs, se produjo la fiesta del nacimiento de Filipa. La colocamos sobre su pecho y ellos le dieron la bienvenida mientras el resto de los profesionales nos mantuvimos en silencio".
Edith concluyó: "El parto y la experiencia de un PVDC son decisiones de la mujer que están acompañadas por nuestro equipo obstétrico desde una enorme responsabilidad".
Por último la partera dejó un mensaje: "Como mujer y partera, deseo que en los consultorios de obstetricia sean escuchados los deseos de la mujer que vienen de un lugar genuino llamado intuición".