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+Caras tuvo el honor de recibir a dos invitados de lujo: Christian Sancho y Celeste Muriega. La pareja de actores, en la entrevista con Héctor Maugeri, compartió detalles íntimos de sus vidas, donde el reconocido modelo reveló los momentos claves de su infancia.
Antes de convertirse en el dueño de los abdominales más reconocidos del país, Christian Sancho tuvo que enfrentarse a una dura realidad: el abandono de su padre biológico. Sin embargo, Sancho no niega su infancia, la acepta con orgullo y la ve como parte de su camino hacia la felicidad y el éxito.
El difícil camino a la felicidad
En un momento emotivo, Héctor Maugeri recordó a la madre de Christian, Susana Skindzier, describiéndola como una mujer valiente que decidió seguir adelante con su embarazo cuando tenía solo 17 años. "Mi mamá es una mujer de avanzada, pasan los años y ella sigue redoblando la apuesta con todo lo que le sucedió en su vida", expresó Sancho, agradecido y orgulloso de su mamá.
En esa línea, el conductor le preguntó por su infancia y acerca del abandono de su padre biológico. “Fue una infancia linda pero a su vez de mucha madurez en el medio”, describe el modelo.
A sus siete años, Christian Sancho se enteró que el papá que lo estaba criando no era su progenitor biológico y que había sido abandonado antes de nacer. “Era todo un cimbronazo en la vida de un chico de siete años. Te replanteás muchas cosas, te hace un niño maduro pero no con dolor, lo viví con un para qué", relata el rosarino junto a su actual esposa.
Esta situación familiar marcó la vida de Christian, quien lleva el apellido de su papá de corazón, Juan Sancho. Y asegura que “con el tiempo me di cuenta de que tuve el mejor papá del mundo y de que lo elegí".
La entrevista reveló no sólo la fuerza y la resiliencia de Christian Sancho, sino también la profunda conexión entre él, su madre y su padre afectivo. Además, reflejó el amor y el apoyo mutuo que comparten Christian y Celeste, tanto en el plano personal como profesional.
MDP
