Wanda Nara está de regreso en la Argentina, pero esta vez con un perfil mucho más tranquilo y menos mediatizado. La empresaria sabe que ahora que está con Telefe, su perfil polémico debe bajar bastante, con lo cual, en esta oportunidad, su arribó fue mucho más tranquilo que el anterior.
A su llegada a Ezeiza, Wanda Nara habló sobre su esposo, Mauro Icardi, y como representante de su marca en el mundo del fútbol, la empresaria cortó con los rumores sobre un posible rechazo del deportista para ir a jugar a Turquía, por pedido de la empresaria.
En esa línea, Wanda fue consultada sobre el futuro de Mauro Icardi en el PSG, pues solo le quedan cinco días, es decir; hasta que termine agosto, para conseguir un nuevo equipo. “Yo puedo aconsejarlo o darle una opinión, pero es él quien decide si se va del PSG”, comentó la blonda, según reportó TN Show.
Wanda Nara fue recibida en el aeropuerto por Kennys Palacios, su amigo y maquillador personal que la ha estado apoyando en medio de todos los escándalos que en las últimas semanas salieron a la luz, tras su anterior arribó al país. “Decí algo… ¿Estás muda?”, le preguntó Kennys a Wanda, saliendo de Ezeiza. “¡Callate!” le respondió la empresaria.
La llegada de la esposa de Mauro Icardi al país, se debe a que en breve comenzarán las grabaciones de “¿Quién es la máscara?”, el nuevo show televisivo donde 24 figuras nacionales e internacionales, estarán camuflados en un disfraz y será Wanda, junto a Karina La Princesita, Roberto Moldavsky y Lizy Tagliani, quienes deberán descubrirlos.
El look que Wanda Nara eligió para su llegada al país
El clima en Buenos Aires parece muy cambiante. Wanda Nara llegó al país sobre las 10:30 hs, un poco más tarde de lo que se había proyectado el aterrizaje de vuelo y una vez salió por la puerta de los arribos, su look de invierno llamó la atención.
En un día soleado, primaveral, la empresaria llegó con un tapado negro oversize, pantalones anchos y sandalias animal print. Su look fue bastante abrigador, para el sol con el que la recibió Buenos Aires. Wanda Nara creyó que aún habría frío, como en su anterior viaje.