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El príncipe Harry participó del último Google Camp que se realizó en Sicilia, donde dio un discurso sobre el cambio climático. Lo novedoso fue que una fuente le confirmó al Daily Mail que el hijo de Lady Di junto a su mujer, Meghan Markle, habría disfrutado de tratamiento especial: masajes, pedicura y otras actividades de spa fueron parte de su agenda.
Los papás de Archie Harrison son huéspedes habituales del Coworth Park en Ascot, el hotel spa de £ 500 por noche, donde aprovechan para "mimarse un poco". Los caprichos del príncipe y su mujer tienen precios módicos; una pedicura comienza en £50, mientras que un masaje de lujo cuesta £140 por un tratamiento de 80 minutos. El ex militar habría acudido a realizarse este tipo de tratamientos en pos de llegar a su obligación con Google, de la manera más relajada posible.
“A Harry y Meghan les gustan los tratamientos regulares en Coworth y los visitaron recientemente para hacerse pedicura y masajes. Utilizan cabañas alejadas, la misma donde Harry se quedó la noche antes de su boda. Sé que es privado y a menudo traen a sus dos perros y por supuesto que ahora a su hijo, Archie", aseguró una fuente al tabloide británico. Así mismo, reveló: "A Harry le gusta arreglarse los pies y también se realiza masajes luego de jugar al polo".
A pesar de su gran discurso sobre las estrategias para frenar el cambio climático, Harry fue criticado por haberse ido de Google Camp en un jet privado. La reunión anual junta a las personas más ricas y poderosas de alrededor del mundo y allí se discuten temas de interés general. Cambio climático, los derechos humanos y el papel de Internet en la sociedad moderna fueron algunos de los tópicos de esta edición.
Recordemos que esta nueva polémica, llega luego de que el duque y la duquesa de Sussex fueran blanco del escarnio público por gastar alrededor de £ 2.4 millones -del dinero de los contribuyentes- para restaurar su Frogmore Cottage. Así mismo, luego de que el heredero de Diana asegurara que con la ex actriz planean tener dos hijos por cuestiones "ambientales". En diálogo con la famosa primatóloga británica Jane Goodall, el duque de Sussex sostuvo que le preocupan las consecuencias para el planeta por el comportamiento de la humanidad y así mismo, reconoció que ve el medioambiente con otros ojos desde el nacimiento de su primer hijo. Al ser consultado por Jane sobre cuántos hijos quería tener con la duquesa de Sussex, él respondió: “dos, máximo”.
