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Un mensaje privado por facebook sin asunto, con un nombre que hasta entonces desconocía, asegura fue la llave que le abrió las puertas a ese mundo que alguna vez imaginó.“Cuando perdí a mi abuela a los 18, con la que me crié en Córdoba, me escribió una hermana por parte de mi papá, que no sabía que existía y fue un giro importantísimo en mi vida porque gracias a eso fui a conocerla y me vine a vivir a Buenos Aires. Siempre me sentí naturalmente actriz y viajar a la ciudad para dedicarme al arte era un anhelo desde chica”, dice emocionada Yamila Saud (27) en su luminoso piso de Palermo donde recibe a CARAS con su cariñosa yorkshire “Bella”.
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Con la luz del ventanal anticipando los primeros soles primaverales, la oriunda de Unquillo, ciudad cordobesa testigo de sus veranos en los corsos de carnaval (donde con 8 años se alzó con el título de “Miss Simpatía”) no recuerda un solo día en el que la actuación no la acompañara. “Siempre participaba en los actos escolares y hacía doble personaje porque era muy histriónica. Mi mamá me llevaba a danzas árabes y nunca dejé de estudiar. Me enloquecía todo lo que era bailar y cantar en un escenario”, subraya una de las protagonistas junto a Franco Masini de “Solo el Amor”, drama romántico dirigido por Diego Corsini y Andy Caballero con estreno el 25 de octubre, en el que además participa de la autoría.
“Me convocaron por mi papel en la película Hipersomnia”, argumenta quien estudió Traductorado de Inglés, llegó a trabajar en un call center, debutó en bolos de televisión y desfiló para Giordano. Inquieta y con más de un proyecto en carpeta — estrenará “Streaming” en Microteatro en noviembre — continúa formándose en teatro con Norman Briski a la vez que toma clases particulares para perfeccionar su inglés. “Sueño triunfar en el exterior. Mi gran desafío es poder actuar en otro idioma”, concluye motivada.
Por: Sabrina Galante
Fotos: Marcelo Dubini
