Una nueva revelación sobre Letizia Ortiz ha preocupado y sacudido a la monarquía española, llevando a la prensa a poner el foco en las supuestas adicciones de la reina consorte de España.
Según fuentes no oficialmente confirmadas, Letizia Ortiz, antes de casarse con Felipe VI, sufrió una severa adicción al alcohol y a otras sustancias en México, donde vivió durante varios años. Se dice que la reina fue internada en un centro de rehabilitación en la ciudad mexicana de Guadalajara después de que sus padres se preocuparan por su estado emocional y físico.
La noticia fue confirmada por algunos medios aztecas, que han revelado detalles sobre el incidente. Trascendió que Letizia era conocida por su gusto por el vino y el tequila, y frecuentaba fiestas y bares en la ciudad de Guadalajara, donde residía en ese momento. Su adicción habría alcanzado tal nivel que incluso llegó a ser hospitalizada en varias ocasiones después de episodios de embriaguez.
Sin embargo, Letizia recibió tratamiento y se recuperó con el apoyo de su familia y amigos. Cabe destacar que aunque no se ha emitido un comunicado oficial sobre la cuestión, algunos expertos han analizado la situación y manifiestan su preocupación por el impacto que podría tener en la imagen de la monarquía española. "La adicción es un tema muy delicado y puede tener consecuencias graves para la salud física y mental de alguien", dijo una fuente anónima del entorno real.
Los medios mexicanos han publicado fotos y testimonios de aquellos que conocieron a Letizia Ortiz durante esos años en los que supuestamente padeció adicción. "Era una persona muy divertida y amable, pero también muy problemática", dijo un amigo anónimo en una entrevista con SalsaRosa. "Le gustaba tomar mucho y pasaba noches enteras bebiendo con sus amigos", comentó.
AM