Lady Di y Carlos III tuvieron una relación tormentosa con un final muy previsto. Las infidelidades por parte de ambos llevaron a que los ciudadanos acusaran a Diana de haber tenido a Harry con otro hombre, el amante que fue su novio durante 5 años. Pero lo que jamás pensaron fue que una joven estadounidense se aparecería en el Palacio de Buckingham para exclamar que es hija del rey y la difunta princesa de Gales.
La hija secreta de Lady Di y Carlos III
Fue hace varios años cuando la revista Globe, un medio de comunicación estadounidense, publicó en la portada de una de sus ediciones la foto de una joven muy parecida, casi idéntica, a Lady Di. La noticia recorrió el mundo y la gente no podía creer el parecido, sobre todo porque era sabido que Carlos y Diana solo eran padres de dos varones.
Sarah, el nombre de la supuesta heredera del trono, ya que de confirmarse sería la primera en la línea de sucesión por 8 meses de diferencia con Guillermo de Gales, habría nacido a partir de uno de los óvulos de Spencer.
Durante los años previos al matrimonio del rey Carlos y Diana, la madre de Harry y Guillermo tuvo que someterse a pruebas de fertilidad, una prueba que también tuvo que atravesar Kate Middleton, para demostrar que podía darle herederos a la corona. Al parecer, uno de los médicos que participó en el procedimiento se robó óvulos fecundados de los príncipe de Gales, mediante fertilización in vitro, los implantó en su esposa.
Es decir, el primer hijo biológico de Carlos y Diana se gestó en un vientre subrogado. Generalmente, los óvulos y espermatozoides de la realeza son desechados cuando se confirme que no son necesarios, pero al haber sido robado e implantados en otra persona, la monarquía no puede decidir sobre otra mujer embarazada. Aunque de igual manera, según Globe, la corona desconocía la situación.
Cuando Sarah tenía 20 años los padres con los que creció murieron en un accidente automovilístico y fue ahí cuando encontró un cuaderno que tenía toda la verdad de sus orígenes por escrito. Un aspecto que llamó mucho la atención es que la historia era muy similar al relato ficticio de Olivia Franklin, acerca de una mujer que admiraba a Lady Di y descubre que sí era su hija a partir de este método.
Según informó la revista Vanitatis, la revista Globe inventó la historia a partir de aquel cuento, pero logró implantar el espacio a la duda. Sin embargo, un vocero del Palacio de Buckingham le reveló al Daily Mail que la foto de "Sarah" fu un fotomontaje y que Lady Di y Carlos III eran padres únicamente de Harry de Sussex y Guillermo, príncipe de Gales.