El Rey Carlos III fue agredido por un ciudadano mientras realizaba un paseo 

El pasado 7 de noviembre, el Rey Carlos III y Camilla Parker Bowles sufrieron un ataque con huevos mientras se encontraban inaugurando la primera estatua de Isabel II desde su fallecimiento, en York al norte de Inglaterra. A solo tres meses de asumir el trono, el monarca británico fue nuevamente atacado. 

“Este país fue construido con la sangre de los esclavos” fueron las palabras que exclamó uno de los tres autores del ataque a huevazos que sufrió Carlos III en noviembre pasado. Afortunadamente los huevos cayeron a pocos centímetros de donde estaban los reyes de Reino Unido, y muchos de los presentes gritaron: “¡Qué vergüenza!” y “¡Que Dios salve al Rey!”. 

Aunque su popularidad va en aumento, Carlos III fue nuevamente atacado por un hombre mientras se encontraba realizando un paseo por St. George’s Square en Luton. Un vecino de la ciudad inglesa lanzó huevos al hijo de la fallecida Reina Isabel II, pero afortunadamente sus guardaespaldas intervinieron para alejarlo de los disturbios. 

La policía de Bedfordshire confirmó que el sospechoso había sido arrestado y en estos momentos se encuentra detenido siendo interrogado.  

 

 

Carlos III: La primera navidad como rey

Desde 1988, la familia real británica solía pasar Noche Buena y Navidad, en la antigua casa de campo de Sandringham, en Norfolk. La reina Isabel II reunía a la familia al completo pero debido a las restricciones de la pandemia de coronavirus, la monarca trasladó su residencia al Castillo de Windsor, redujo el número de invitados e incorporó el distanciamiento social.

Sin embargo, este año, el rey Carlos III quiere recuperar la tradición y planea invitar a toda su familia a Sandringham nuevamente. Además, en la mañana del 25 de diciembre, todos asistirán a misa en la Iglesia de Santa Magdalena, almorzarán en familia y mirarán juntos el primer discurso de Navidad de Carlos como rey del Reino Unido.

Además del rey y su esposa, la reina consorte Camila Parker Bowles, se espera que asistan a Sandringham, los príncipes de Gales, Guillermo y Kate Middleton, junto a sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, y los tres hermanos del rey con sus respectivas familias.

Con mucha antelación, varios empleados de la Casa Real ya comenzaron a decorar Windsor, colocando un gran pino con más de 3 mil luces cintas de color púrpura y un ángel en la punta del árbol.

A pesar de mantener las costumbres, sin dudas esta será una Navidad distinta para la realeza británica.

 

FF